La telemedicina, mucho más que una videollamada con el médico
Para la gran mayoría de los mortales, la idea de telemedicina les puede remitir a una simple videollamada con el doctor. Algo incluso futurista que se suele ver con admiración, que todos desearíamos, pero que no acaba de cuajar.
Sin embargo, la llegada de la covid-19 ha dado alas a nuevas plataformas y vías de acceso a la telemedicina, tanto por parte de iniciativas privadas como de instituciones sanitarias públicas. Por ejemplo, en Estados Unidos, un estudio de McKinsey reveló que del 11% prepandemia se pasó a un 46% de usuarios de telemedicina.
Si bien es cierto que en el ámbito de la ciudadanía la telemedicina se está implantando poco a poco, en el entorno intrasanitario hace años que funciona con una gran tasa de éxito.
Hemos hablado con Carlos Nueno, máximo responsable de Teladoc, una de las empresas de medicina virtual más importantes del mundo, cuya sede internacional se encuentra en Barcelona. Su plantilla tiene alrededor de 10.000 médicos contratados a nivel global que ejercen servicios telemáticos de salud como complemento a su actividad asistencial.
Según nos dice, los gobiernos cada vez se están dando más cuenta del potencial de la telemedicina. En España, el sistema sanitario catalán es pionero en la introducción de la eConsulta, un servicio que permite a todos los ciudadanos acceder a su médico de cabecera desde una app, y será el médico quien decida si la consulta se puede resolver a distancia o requiere una visita presencial.
Nueno Añade otro ejemplo: "En Alemania, el gobierno ha puesto en marcha regulaciones de la asistencia digital que incentivan a los proveedores médicos a que estén digitalizados. Es prácticamente una obligación. También regulan las llamadas Terapias Digitales, que son aquellos tratamientos que se pueden dar completamente por vía telemática, como los de salud mental, por ejemplo: por primera vez, un estado europeo las ha empezado a reembolsar las terapias digitales y las sesiones terapéuticas que sean requeridas"
Está demostrado que recibir atención psiquiátrica o psicológica desde tu propia casa ayuda a dar la confianza y la seguridad que el paciente necesita.
El experto menciona estudios que avalan que el 94% se sienten más cómodos con terapias virtuales en su domicilio que en las visitas presenciales a la consulta del terapeuta.
Otros usos de la telemedicina
Los medios digitales se han posicionado también como un gran valor a la hora de gestionar las enfermedades crónicas de una forma mucho más eficiente y con un gran ahorro de tiempo y dinero, tanto para el sistema como para el paciente. No solo estamos hablando de la típica llamada telefónica de seguimiento, sino también de los dispositivos conectados, capaces de transmitir de forma automática las mediciones de salud que el médico necesita conocer para tener al paciente bajo control: glucómetros, tensiómetros, oxímetros, etcétera. Y en caso de anomalía, el médico de Primaria se encargará de conectar al paciente con el especialista oportuno. "Esta será la revolución que veremos en los próximos diez años", augura Nueno.
Dentro del ámbito profesional sanitario existen infinidad de recursos que hace solo unos años eran inimaginables. Uno de ellos es la Tele-UCI, el servicio de cuidados intensivos a distancia, que es especialmente valorado en los centros sanitarios rurales. Mediante un sistema de dispositivos conectados, especialistas pueden monitorizar las constantes de sus pacientes en todo momento y a muchos kilómetros de distancia. Es probable que en un hospital rural no haya un facultativo con la formación o el conocimiento necesarios para asistir a según qué pacientes, pero sí se puede disponer de la teleasistencia entre médicos, quienes podrán transmitir las instrucciones que sean necesarias a partir de la información que reciben en tiempo real.
Carlos Nueno, presidente internacional de Teladoc, durante la entrevista.
También se dispone de la Tele-Neonatología. Los partos de bebés prematuros tienen un gran riesgo. Por eso es crítico tener a un experto asesorando en el mismo momento del parto, gracias a las tecnologías que ya se están utilizando.
Otro ejemplo más concreto es el del Hospital Sant Joan de Déu, uno de los más prestigiosos del estado en pediatría, que tiene un acuerdo establecido con el Hospital de Berga -un centro de recursos mucho más limitados en un entorno prepirenaico-, por el cual puede ofrecer el servicio de pediatría las 24 horas, teniendo al médico de familia presencialmente y la asistencia virtual especializada para pacientes infantiles desde Barcelona.
La Dermatología es una de las especialidades más beneficiadas de la telemedicina. Carlos Nueno explica que Teladoc ha implementado una tecnología en el Reino Unido por la cual el médico de familia puede pedir un informe dermatológico en cualquier momento: "Tú vas al médico de Primaria y allí mismo, desde la propia consulta te sacan la foto del elemento de la piel que quieras consultar y lo envían al dermatólogo, y el dermatólogo elabora el informe diagnóstico con las instrucciones de tratamiento para el médico que te trata".
El sector sanitario muestra un creciente entusiasmo por la aplicación de la tecnología digital en su segmento, porque aporta más datos, mejor visión que el ojo humano, datos biométricos en tiempo real, etc. La telemedicina no tiene que ser un sustituto de la medicina presencial, pero sí un complemento con el que pueda salir ganando tanto el médico como el paciente.